¿Notas cambios en tu mente, cuerpo y alma? Si has iniciado un viaje hacia un nivel superior de conciencia, habrá cambios tanto mentales como físicos que te acompañarán en tu camino.
Cosas que antes no creías posibles se te revelarán de repente. Los niveles de conciencia más elevados permiten niveles de comprensión más elevados, y con este cambio se producen muchos cambios. Al iniciar tu viaje, mirarás el mundo de forma diferente. Experimentarás un cambio en tu sistema de creencias espirituales que alterará tus creencias fundamentales.
Si experimentas alguna de las siguientes señales, es probable que estés cambiando a ese nivel superior de conciencia. Acepta el cambio y disfruta del viaje.
1. Tienes una energía más suave.
Al pasar a un nivel superior de tu mente consciente, dejas de lado toda la agresividad y la ira a las que antes te aferrabas. No tienes espacio para todo el ruido creado por los sentimientos de mala voluntad, ya que estás completamente centrado en tu propio funcionamiento interno. Sencillamente, no tienes tiempo para la hostilidad en ninguna de sus formas.
2. Asumes la plena responsabilidad de tu vida y de dónde estás ahora.
Sabes que tu pasado es el resultado de tus reacciones a las experiencias, y has dejado de culpar a los demás de tus errores. Te das cuenta de que no sólo tienes que aceptar el pasado, sino que también tienes que aprender de él. Si no cierras efectivamente la puerta al pasado, éste te arrastrará en el futuro. Mediante la meditación y la autorreflexión, ahora eres dueño de todos los aspectos de tu vida. No das las riendas a nadie.
3. Eres dueño de tus emociones.
Sabes que si quieres ser feliz y tener éxito, debe venir de tu interior. Eres completamente capaz de crear la vida que quieres vivir, y tomas decisiones afirmativas para moverte en esa dirección. Ya no dependes de los demás para conseguir la felicidad. Ahora puedes bajar el ritmo y pasar tiempo tranquilo contigo mismo sin sentir que no estás siendo productivo. Ya no tienes miedo de lo que pueda ocurrir en la vida, porque estás preparado para cualquier obstáculo.
4. Practicas el amor propio.
Te ocupas de tus propias necesidades antes de atender las de los demás. Sabes que sólo podrás atender a los demás cuando tú mismo estés bien atendido. Ya no esperas la perfección de ti mismo. En cambio, aceptas las imperfecciones y las celebras. Las ves como realmente son: oportunidades para aprender y crecer hacia niveles superiores de conciencia. Tienes un fuerte deseo de estar solo, para poder seguir explorando el funcionamiento interno de tu mente.
5. Eres amable. Eres cariñoso y compasivo.
Te perdonas a ti mismo y a los demás. Disfrutas ayudando a los demás en sus viajes. Siempre estás mejorando y preguntando qué puedes hacer por los que te rodean. La gente se siente atraída por tu energía amable, y notas que quieren pasar tiempo contigo.
6. Tienes un fuerte deseo de cambiar tu vida.
Algo fuerte dentro de ti te motiva a realizar cambios significativos en tu vida. Tu instinto te dice que ha llegado el momento de dar un salto hacia lo desconocido y hacer que se produzca el cambio.
Cuando empiezas a cambiar a un nivel superior de conciencia, hay varias cosas que ya no encajan. Te has dado cuenta de que sólo deberías dedicar tu tiempo y energía a las cosas de la vida que cumplen directamente tu recién encontrado propósito. Tu trabajo, tu casa y tus pertenencias personales pueden ser cuestionados a medida que cambias a un nivel de conciencia superior.
7. Te alejas de las personas negativas.
Ya no toleras a los que chupan tu energía positiva. El drama no te atrae, y no quieres formar parte de él en tu vida. Aunque no es fácil, te encuentras terminando amistades y estableciendo límites que nunca antes habías establecido. La energía negativa sólo ralentizará tu transición, y sabes que sólo tienes espacio en tu vida para aquellos que tienen tus mejores intenciones.
8. Tienes problemas para dormir.
A menudo, cuando la gente hace la transición a un estado de conciencia superior, tiene problemas para dormir por la noche. No te alarmes si esto te ocurre en tu viaje. Tu mente subconsciente está trabajando duro, y puede haber momentos durante las horas nocturnas en los que necesite enviar un mensaje a tu mente consciente.
9. Te deshaces de todos tus hábitos destructivos.
Si antes comías alimentos poco saludables, bebías alcohol o fumabas, no te sorprendas si ya no quieres practicar ninguno de esos viejos hábitos. Ahora empiezas a ver que el éxito a largo plazo implica renunciar a las gratificaciones a corto plazo. Ahora que comprendes y adoptas de verdad esta ideología, puedes simplemente dejar atrás los malos hábitos.
10. Eres más productivo que nunca.
Te centras como un láser en tus objetivos, por lo que eres capaz de hacer más cosas. Trabajas con más eficacia porque estás más presente en todo lo que haces. Ya no te sometes a las distracciones. Tus prioridades están claras (quizás gracias a un tablero de visión), y no pierdes el tiempo. Haces lo que hay que hacer para alcanzar tus sueños. Tus niveles de estrés también han disminuido, porque tienes una visión de conjunto y puedes ver cómo encaja todo.
11. Ya no sientes la necesidad de competir.
Te olvidas de por qué antes siempre sentías la necesidad de probarte a ti mismo. Ya no necesitas competir con todo el mundo porque ya no te comparas con los demás. Ahora sabes que ayudando a los demás en lugar de competir con ellos, te estás ayudando a ti mismo y mejorando tu futuro.
12. Tienes un inmenso sentido de la gratitud.
Aprecias todo lo que tienes en la vida y todo lo que tendrás en el futuro. La gratitud forma parte de tu tiempo de silencio diario. Ves todo lo bueno que hay en el mundo y estás agradecido por ello. Aunque sabes que hay mucho trabajo por hacer, estás agradecido por poder ser parte de la solución en lugar del problema.
Cuando pasas a un nivel superior de conciencia, toda tu vida cambia. Piensas en la persona que solías ser y te das cuenta de lo inmadura y egoísta que eras en comparación con la persona que eres hoy. Has hecho cambios significativos, y siempre tendrás más poder.
Acepta los cambios, ya que te aportarán un mayor nivel de satisfacción con tu propia vida, así como una capacidad innata para ayudar a los demás. Estos cambios son algo bueno porque significan que estás cambiando a algo mejor, así que haz las paces sabiendo que los cambios te están llevando a una vida más satisfactoria. Te estás convirtiendo en la persona increíble que has nacido para ser.
